

Versión autofloreciente de la conocida Afghan Kush, cruzada con la prestigiosa genética Rudelaris del banco Fast Buds. Grandes cogollos cubiertos de abundante resina. Ideal para la elaboración de hachís.
Planta pequeña y compacta con entrenudos cortos, muy resinosa y aromática. Resistente al moho y a las plagas, se adapta bien a climas duros. Ideal para la elaboración de hachís por su especial aroma terroso, dulce y especiado. Variedad muy resistente, recomendada para climas duros o cultivadores con poca experiencia.
Su sabor es un clásico de la vieja escuela, con una mezcla de sabor terroso y pino, con toques picantes y un fondo dulce. Desprende un potente aroma a kush, con toques cítricos.
El efecto es índico y muy potente, con una relajación corporal muy notable, llegando a dejarte dormido. Muy apreciada para uso medicinal en temas de insomnio, dolores o falta de apetito.
Características: